-Bob: Así es Jim... ¡¡Alabado sea Nuffle!!!. Hoy tenemos con nosotros a Igor, entrenador del equipo de orcos más novato del circuito competitivo, las Hermanitas de la Caridad.
-Jim: Oh Bob, ¿Hay algo más maravilloso que ver a un novato sufrir su primer placaje?
-Bob: Se me saltan las lágrimas, Jim, ¡pero de la risa!. ¡Ver a un novato sufriendo su primer placaje es de lo más divertido!
-Jim: Por supuesto Bob, que un minotauro del caos te golpee en la cabeza ayuda a formar el carácter. Pero dejemos que sea el propio entrenador el que nos lo cuente. Igor, ¿que tienes que contarnos del torneo que se celebró el 18 de Febrero en la asociación Bilbohammer ? La ya famosa y legendaria... ¡¡LoveBowl!!
-Igor: ¡Buenos días asiduos a la enfermería del banquillo!
El domingo tempranito nos pusimos camino a nuestro primer torneo, la Lovebowl que se celebraba en el estadio de Bilbohammer. Los jabalís que tiraban de los carros apenas podían con el peso, ya que decidimos llevarnos al troll (con defensa). Afortunadamente para los jabalís, el troll no volvió, ya que murió en "extrañas circunstancias" en el último partido. Se envenenó con alguna seta del campo de juego o no sé qué...
La verdad, no me podía importar menos! Maldito bastardo...qué inutilidad de criatura...Ni siquiera intentamos regenerarlo! En el resto del carromato iban 4 blitzer (uno de ellos con golpe mortífero), 4 orkos negros ( 2 con placar), dos líneas y el lanzador con placar. Éste último sin duda fue el jugador más productivo con dos TouchDowns (TD).
Íbamos con ganas de competir gracias a la experiencia que adquirimos en la Liga de Bloodbowl de nuestra Asociación Valhalla, pero a sabiendas que entrenadores más experimentados intentarían patear nuestros respingones culos verdes...Nos conformábamos con mandar adversarios a visitar al apotecario, sinceramente.
El primer partido nos enfrentamos contra Borcteam, otro equipo de orcos...Fue un festival de tortas, melés, acumulación de masa verde,...Creo que hubo un momento que se unieron espectadores a la refriega y todo, porque me pareció ver un saurio en alguna trifulca... Finalmente aunque nos adelantamos en el marcador, el balance de tortas se saldó a favor del rival y no hubo efectivos suficientes para evitar el TD de empate en el último turno. Sabor agridulce, un TD en el ultimo turno siempre fastidia pero un empate en un primer partido de torneo superaba mis expectativas.
Pero los Blitz Boys, rival en el siguiente partido, ese equipo de humanos con sus hipnóticas corredoras y aguerridos blitzers eran harina de otro costal: equipo experimentado con un entrenador curtidísimo en mil partidos. Además culpo a mis goblins utilleros por no haber cocinado a tiempo la comida para el troll. Se pasó el 75% del partido (12/16 aprox para el que quiera entender) salibando y mirando una vaca situada en una colina cercana, sin atender mis órdenes o al transcurso del partido. Victoria (2-0) merecida para los humanos y cien latigazos para los goblins utilleros...
Y en el tercer y último partido mi equipo vio la luz...Otro partido fraticida entre orkos, otro partido de tortas, montañas de orkos y colmillos por el aire... La peculiaridad de los orkos del equipo de Ciudadanos, es que no tenían miedo a esquivar, incluso esos grandullones llamados orkos negros esquivaban exitósamente. Se movían como elfos y salían de cualquier enfrentamiento en inferioridad numérica. Otro hecho decisivo fue la muerte del troll, que debió de quedarse con hambre después de zamparse a la vaca de la colina y con el objetivo de saciar su infinito apetito debió de comerse unas setas venenosas que se encontró en el terreno de juego. Mano de santo. El equipo empezó a hacer bajas cruciales y llevar el balón hacia la zona de anotación. 1-0 para las Hermanitas de la Caridad y vuelta de viaje a casa.
El viaje de vuelta fue alegre:
Los jugadores y entrenadores, satisfechos por la labor realizada (aunque sabedores de su graaan margen de mejora).
Los goblins utilleros con la dolorosa lección aprendida.
Y los jabalís contentos de no tener que llevar un lastre innecesario.
Mis agradecimientos a los organizadores de este pequeño gran torneo y a los entrenadores con los que me crucé: David, Iban y Jon.
De todos ellos aprendí, algo que es invalorable.
-Jim: Vaya Igor, se me saltarían las lágrimas de no ser porque los vampiros no tenemos glándula lagrimal.
-Bob: No te pongas sentimental Jim, no es propio de este deporte. Recuerda aquella noche de cancaneo con aquella animadora enana... que resulto no ser una mujer. ¡ Aquí no te puedes fiar de nadie!
- Jim: No me lo recuerdes Bob, todavía la echo de menos...
- Bob: Bueno amantes de la sangre y los TD, cerramos la retransmisión no sin antes desearos unas dolorosas partidas a este nuestro infernal deporte... ¡¡Bloodboooooowl!!
- Jim: ¡¡Bloodboooooowl!!